La ciudad fue poblada hacia el 900 a. C. por los liburnios, una tribu iliria. Pasó al Imperio romano con Iliria, convirtiéndose en municipio en 59 a. C. y en colonia romana en 48 a. C. Fue la capital del distrito de Liburnia en Iliria. En el año 381 se convirtió en sede de un obispado.Bajo el Imperio bizantino llevó el nombre de Diodora y pagaba un tributo de ciento diez piezas de oro. Tras la destrucción de Salona por los bárbaros ávaros y eslavos en el siglo vii, fue la capital de la provincia de Dalmacia, comenzando a ser llamada «Zadar».Durante las invasiones bárbaras, las ciudades costeras de Dalmacia (entre ellas Zadar) fueron refugio de los autóctonos ilirios romanizados, que desarrollaron la lengua dálmata, una lengua neolatina que se extinguió en el siglo xix.
Al comienzo del siglo ix o poco antes, los carolingios establecieron el protectorado en la región según se deduce de la existencia de ejemplos arquitectónicos francos. El obispo Donat de Zadar visitó a Carlomagno en Dietenhofen. En 812, por el tratado de paz de Aquisgrán, fue reconocida en el Imperio bizantino, que la conservó hasta el reinado de Basilio II el Macedonio.